Sugar Lane

febrero 11, 2011

Es genial ver que meses después de haber terminado esta gran aventura sigo teniendo muchísimas visitas diarias.

Me gustaría que dejaseis más comentarios, y si quereis seguirme tengo nuevo blog:

http://sugarlaneblog.blogspot.com/

 

 

Incredible India!

agosto 12, 2010

12 de Agosto de 2010

Hace un año llegaba a la India, yo con mi maleta rosa, sin tener la más remota idea acerca de lo que me esperaba.

Hoy también se cumple un mes de la fecha de mi regreso a España, así que ha llegado el momento de hacer balance y cerrar capítulo.

Dicen que la India te cambia. Yo no fui allí con esa intención, no lo encaré de forma espiritual, como tantos occidentales que llegan al país buscando la iluminación, ni tampoco me fui en plan hippie a tirarme en las playas de Goa y mantenerme haciendo pulseritas. Tampoco es que fuese con la intención de estudiar mucho marketing, pero si que me fui a aprender… aunque sin saber muy bien el qué.

Y aprendí. Muchísimo. Desde cómo comer con las manos a cómo comportarse en un templo. Aprendí a conducir una moto en el caos absoluto, a cantar el himno nacional al inicio de cada evento o película, a tener paciencia, a improvisar, a olvidarme de la agenda, a depender de la gente y a pedir ayuda, y a aceptarla incluso cuando creía no necesitarla. Aprendí lo complicada que es una sociedad dividida en castas y con unas tradiciones tan arraigadas, y lo complicado que es un sistema político basado en la corrupción y en los lazos de sangre. Me dí cuenta de lo importantes que son cosas tan básicas como el agua o la luz, y lo absurdo de la importancia que la sociedad da al tono de piel. Aprendí el poder que tiene el cine en una sociedad tan desigual, y lo hipocresía del amor bollywodiense en un país dónde los padres compran a sus hijos mujeres con la ayuda de los anuncios en el suplemento del periódico. Aprendí lo afortunada que soy por ser una mujer nacida en un país dónde mi único deber en la vida no sea encontrar un buen marido antes de los 25 y darle muchos hijos, a poder ser varones, y lo afortunada que soy por poder decidir cada mañana lo que me pongo, sin que una minifalda y unos tacones me conviertan automáticamente en una prostituta. Aprendí que no hace falta ser un niño para poder jugar, ni ser adulto para trabajar.

Aprendí a apreciar la India tal y cómo es, con sus contrastes y sus mezclas agridulces. Con sus millones de dioses, de sabores, de colores y de olores. Con el polvo y las lentejuelas, con los palacios de maharajaes y puestos callejeros de pani puri, con viajes en trenes locales y en motos de 250.

Y la última noche, en Mumbai, Utsav me preguntó qué había sido lo mejor de la India. Y la respuesta es muy sencilla. Podría haber dicho el Taj Mahal, el olor a jazmín de Mysore, los anacardos de Goa, los cánticos del Templo Dorado, los abdominales de Sahid Kapoor, el tigre blanco o los lagos de Bhopal. O quizás el Cad-B, o el helado de Gulkan, la puesta de sol en Pondichery, las sedas que me han hecho perder la cabeza, el masala chai, las cascadas de Lonavla durante el monzón, la brisa nocturna en Marine Drive, los cosmopolitans de Malaka Spice, las fresas de Mahabaleshbar, los bailes indios o conducir sin casco con la melena al viento. Pero no, lo mejor de la India es la gente, todos esos amigos que me han cogido de la mano para cruzar la calle, que me han llevado a descubrir la comida que sabrían que me gustaría, los que me han protegido del sol, me han hecho divertirme “como los indios”, han cuidado de mí cuando he caído enferma o de la moto, han cruzado medio país para despedirse o para comer conmigo, los que me han explicado con infinita paciencia cada tradición, mito o costumbre que mi mente europea no lograba digerir, los que han estado en todo momento, cuando los necesitaba y cuando creía que no, cuando estaba mal y cuando estaba bien. Ellos han sido lo que me han hecho quedarme en la India todo el año en vez de sacar el billete de vuelta al primer desencanto. Y en especial el que hacía la pregunta. Pero no sólo los amigos son parte de esa gente, si no todas esas personas que sin conocerme de nada, desde camareros a vendedores, recepcionistas o niños que cruzaban la calle, y muchos de ellos siendo tan pobres como para no tener zapatos, me han dado lo mejor que tenían; su sonrisa.

Namaste India

julio 9, 2010

09 de Julio de 2010

Ya es oficial; No puedo cerrar las maletas.

Estoy esperando a Archana para ir a la GPO por última vez y mandar otra caja con todo el exceso de equipaje.

Ayer tuve cena de despedida, con regalos entrañables.

Y hoy me toca esperar. Esperar a Archana. Esperar al coche que me llevará a Mumbai. Esperar a que Utsav salga de trabajar. Esperar a que se haga la hora de la despedida. Esperar a facturar, a pasar controles, a embarcar…

Desayunaré en París. Suena muy romántico, verdad? Un “café au lait” con un “pain au chocolate”, vistas a la Torre Eiffel y un violinista tocando “La vie en rose”… Luego no lo será tanto; llegaré sin haber pegado ojo, cargada de equipaje como una mula, no tendré ni hambre, igual el vuelo va con retraso y ni es la hora del desayuno… pero en fín… siempre nos quedará París.

Now I understand what you tried to say to me…

julio 8, 2010

8 de Julio de 2010

This world was never meant for one as beautiful as you.

Último día en Indira

julio 6, 2010

6 de Julio de 2010

Archana y yo hemos ido al templo de Chatursungui por la mañana, para pedir por las notas, que salen hoy.

Tras hacer la ofrenda de coco, agarbati, tika, prasad… nos hemos ido a comer y después a Indira, a despedirme y a recoger el título.

Archana el suyo y yo el de Utsav. Para que te lo den hay que hacer una especie de gymkana por todos los departamentos recogiendo firmas que acrediten que no debes nada (biblioteca, deportes, administración, cantina, transportes…) y cuando es necesario te hacen bajar al sótano a pagar la multa y volver con el recibo a por el sello. La matada de escaleras ha sido mucho, pero bueno, lo mínimo que puedo hacer por él.

Así que ya tenemos el título MBA. Manjula el suyo, yo el de Utsav y Amruta el de mi ex. El ambiente se cortaba con cuchillo. Que sean muy felices juntos, si pueden. Estoy tan cansada de ambos que ni siento nada.

También me he despedido de todos los de Indira, incluyendo al de la cantina, que siempre se alegra de verme, a Rajesh, el de recepción, y a Pandit Mali Sir, el director, que me ha estado pidiendo feedback. Yo se lo he dado, y le he deseado suerte, que falta les hace para mejorar aquello.

Y el resto del día bien.

Ha venido Ganesh desde su pueblo (unas ocho horas en bus) para despedirse, así que hemos salido a cenar. Y al postre se ha apuntado Sourabh.

Entre los dos parece que van llenando las maletas.

Goodbye my lover

julio 5, 2010

5 de Julio de 2010

Se han llevado a la Pinky.

Esto se acaba.

Henrike no está, ni Jan, ni Utsav.

A Rohit ni le cojo el teléfono, la cosa no terminó bien.

No queda chocolate, ni anacardos, por no quedar no queda ni alcohol para ahogar las penas.

Ni rotis, ni gulkan. Ni maaza, ni pani puri.

Solo yo y un par de maletas vacías, esperando a que alguien las llene.

Hoy ni siquiera brilla el sol. Y tampoco llueve. Pero a nadie parece importarle.

I’m your cherry bomb

julio 4, 2010

4 de Julio de 2010

Ayer vino Utsav desde Bangalore (900 Km en bus indio). Ha venido para despedirse, así que disfrazamos el motivo haciendo todo lo que se nos pasó por la cabeza con tal de estar distraídos.

Bromas tontas que solo nosotros entendemos, una buena dosis de “Cherry Bomb”, pizza y tomaduras de pelo.

Después llegó Sourabh, accidentado, así que tuvimos que hacer de doctor y enfermera… con lo que me cuesta a mi no desplomarme cada vez que veo sangre…

Archana también se vino a pasar la tarde, pero a cenar no se quedó, porque para eso es como Manjula.

Y nada más irse a Sourabh se le ocurre una gran idea para eliminar las botellas de Absolut de mi cocina; bebérnoslo todo! Montamos altavoces, los grandes éxitos de Bollywood, palomitas, noodles y cocktails.

La cosa empezó con cosmopolitans, de ahí pasamos a mezclarlo con todo líquido que quedaba en mi nevera: maaza, slice, frooti, minute maid, sprite, limón… Y si, la idea fue un éxito. No quedó ni gota.

Cuando se hizo la hora del partido, fuimos a la carpa que han montado en Sayajit para ver la semifinal de España, pero al llegar nos dimos cuenta de que nos lo estábamos mejor en casa, así que volvimos a seguir bailando.

Esta mañana lo he llevado a coger el bus para Mumbai, se queda allí esta semana y así puede ir al aeropuerto el viernes. Ha sido el último paseo con la Pinky, mañana la entrego a su nueva dueña.

Así que aquí estoy, sin Utsav, casi sin Pinky, con una buena resaca y bebiéndome todo el Bisleri que me queda…

This time for Africa!

julio 2, 2010

El Mundial de África ha comenzado. Aquí son más, mucho más, de cricket, pero aún así le están dando bastante importancia al evento: pantallas gigantes en restaurantes y hoteles, banderas de todos los países decorando las ciudades y hasta bebidas especiales dedicadas a cada equipo en CCD (la de Spain es de chocolate con helado de vainilla, café y almendras).

Los favoritos somos nosotros, así que más de uno de mis amigos indios tienen la bandera de España de foto de perfil en Facebook. La mayoría no saben muy bien en qué continente nos situamos, pero ellos ya tienen la roja. Así que hoy no es raro cruzarte con gente en moto con un casco de Alonso (bandera Asturiana incluída) y una camiseta de Torres. Ver para creer.

Planes de futuro

junio 28, 2010

Entre compras de última hora, mercadillo de muebles, embalajes y papeleos también me ha dado tiempo para reuniones con el creador de la Pune Fashion Week.

Me han propuesto que colabore en la organización para la Goa Fashion Week, que tendrá lugar en Diciembre, el proyecto es todo un reto, pero si sale adelante será un éxito asegurado!

Por la India con Manjula

junio 26, 2010

Mi amiga Manjula, quien se viene al viejo continente el próximo curso, empieza a mirar la India con otros ojos y aprovecha mis últimos días en su país para aprender todo lo que pueda de la cultura occidental.

Cosas que para nosotros son de lo más normal, pero que para una chica india de mi edad, que ha vivido con sus padres desde que nació y que a día de hoy tiene que estar a las diez en casa, son todo un descubrimiento.

Un día vamos a comer pasta, otro a un cajero automático para que le explique cómo utilizar una tarjeta y sacar dinero, a veces le da por preguntar por las normas de tráfico, y como aún no tiene muy controlado el tema de precios, dice que cuando quiera ir a un sitio se alquila un coche… lo que no sabe es que en Europa los coches de alquiler no suelen llevar chofer. Lo del metro le suena a ciencia ficción, y utilizar el transporte público para ella debe ser lo mismo que para Carmen Lomana.Otro día pregunta si se debería comprar unas sandalias romanas para pasar el invierno… creo que lo del frío no lo tiene muy asimilado, por más que le hablo de nieve ella sigue queriendo comprar sandalias. También hemos ido a Mango, a que se compre un par de chaquetas (que se piensa poner sin abrigo…) y la he acompañado a dar un gran paso en su vida; se ha comprado sus primeros tacones! No sabe dar un paso, pero ya nos pondremos… pasito a pasito.